El director ejecutivo de la Fundación Hora de Obrar representó a Sudamérica en el encuentro anual celebrado en la ciudad de Ginebra. Se discutió sobre el panorama sociopolítico mundial y se analizó el progreso del plan estratégico de la Alianza.
La Junta Global de Gobierno de ACT, compuesta por 22 miembros, recibió el informe de la secretaría general de la Alianza y discutió el progreso del plan estratégico hacia el año 2026. En este contexto, Nicolás Rosenthal destacó el papel fundamental de las iglesias y los cristianos como interlocutores éticos en medio de estos desafíos.
«El panorama global es complicado en términos sociopolíticos. El 70% de la población mundial vive bajo dictaduras y en varias democracias occidentales se están observando procesos autocráticos», señaló. Además, destacó la creciente desigualdad y la destrucción de los recursos naturales como problemas urgentes que requieren atención.
El director ejecutivo de la Fundación Hora de Obrar resaltó que, en este contexto, las iglesias, cristianos y cristianas tienen un rol importante como agentes de cambio. «Podemos apelar a un cambio de conciencia y tenemos trabajos concretos de transformación. No podemos dejar de cumplir con el mandato de tener una voz profética. No podemos bajar los brazos», afirmó.
Rosenthal hizo hincapié en la necesidad de que las iglesias se involucren activamente en la promoción de la justicia social, la defensa de los derechos humanos y la búsqueda de soluciones a los desafíos globales. Su participación en la reunión de la Junta Global de Gobierno de ACT sirvió como plataforma para compartir estas preocupaciones y destacar la importancia de la colaboración entre las iglesias a nivel regional y global.
En tiempos de incertidumbre y tensiones sociales, las palabras de Rosenthal resuenan como un llamado a la acción y a asumir un papel protagónico en la construcción de un mundo más justo y equitativo.